Dice David Tolk: "Aunque el otoño es mi estación favorita del año, he llegado a amar el carácter diverso, único y hermoso de cada temporada. También estoy muy agradecido por cada una de las temporadas únicas que he experimentado en mi vida y espero con ansias la próxima temporada con mi esposa e hijos. La música me ha traído paz y perspectiva durante todas las estaciones de mi vida. Espero que sientan paz, alegría y esperanza al escuchar la música de este álbum." Nacido y criado en la pequeña ciudad de Mendham, Nueva Jersey, David Tolk vive al pie de las montañas Wasatch con su esposa y cuatro hijos. Cuando no está practicando el piano, ejerce la abogacía con sus socios en Salt Lake City, Utah.
David Tolk - Seasons (2017)
01. Morning Light
02. Beneath the Starry Night
03. Seasons
04. I Missed You
05. Eternity
06. Clouds on the Mountain
07. Falling Leaves
08. Mists of Scotland
09. Elegy
10. Holiday
11. The Return
Duración total: 39:55 min.
David Tolk - Seasons (2017)
01. Morning Light
02. Beneath the Starry Night
03. Seasons
04. I Missed You
05. Eternity
06. Clouds on the Mountain
07. Falling Leaves
08. Mists of Scotland
09. Elegy
10. Holiday
11. The Return
Duración total: 39:55 min.
Los necios son como ondas sobre el agua, y cualquier cosa que hagan, pronto se diluye; mas los rectos son como tallas en la piedra, pues su acción más pequeña resulta perdurable.
ResponderEliminarNagarjuna
Wu wei, la filosofía oriental con la que conseguirá todo lo que se proponga
ResponderEliminar“El mejor propósito es no hacer ninguno, simplemente estar, observar y aceptar lo que sucede”, afirma Daniel Gobet, experto en filosofía china. “Aunque el Wu wei –concepto filosófico oriental asociado al taoísmo– se está traduciendo como no acción, es más acertado decir actuar sin tomar partido". Es decir, los consabidos objetivos de Año Nuevo que nos piden toma de decisiones a la espera de un resultado, tipo adelgazar o hacer deporte, no sería Wu wei.
La primera vez que se articuló esta idea fue en el Tao Te Ching, escrito en China alrededor del 600 a.C. Consiste en no realizar acción alguna y que el orden natural prevalezca. Así las acciones resultarán, cuando lleguen, fluidas, enérgicas y lograrán los resultados deseados. El narrador taoísta Chuang Tzu lo explicó así, alrededor del 350 a.C: “Del vacío del sabio surge la quietud. De la quietud, la acción. De la acción, el logro”.
El maestro Tian Cheng Yang precisa: “Hacemos estos propósitos porque no estamos en equilibrio con nosotros mismos ni con los demás, y mucho menos con nuestro entorno natural".
El Wu wei consiste en dejar que el ordena natural prevalezca y así las acciones serán fluidas, enérgicas y se lograrán los resultados deseados.
Para el maestro si aplicásemos el Wu wei a diario estaríamos en mayor armonía en todos los aspectos de nuestra vida de una forma más natural y sencilla: "nos alimentaríamos mejor, realizaríamos ejercicio, no haríamos cosas dañinas para nosotros ni para los demás y tampoco para la naturaleza que nos sustenta", concluye.
Los ríos siguen su curso hasta erosionar la roca más sólida, ¿verdad?
Esta doctrina no equivale al inmovilismo, sino a la búsqueda de la propia virtud, y nuestro comportamiento es lo primero que podemos modificar para contribuir a cambios más profundos.
Si desde la Ilustración se asumió la Hipótesis de la dialéctica –solo se mejora una situación reaccionando ante ella y forzando una nueva realidad–, para el taoísmo se puede actuar sin forzar, entendiendo el camino de las cosas.
Por eso, Tian Cheng Yang compara el Wu wei con la naturaleza pasiva y perseverante del agua del río, en apariencia débil y delicada, pero cuya fuerza erosiona, poco a poco, la roca más sólida. Así, el taoísmo recurre a este fluido para representar la acción del Tao (el principio). “Se adapta al medio, sigue su curso natural y además sirve de hogar o sustento para la vida”, aclara el maestro.
"El Wu wei se adapta al medio, sigue su curso natural y además sirve de hogar o sustento para la vida", Tian Cheng Yang
Y es que esta filosofía, “enseña a fluir con la madre naturaleza, aprovechando las circunstancias propicias que procuren desde una existencia tranquila, hasta hacer negocios o cumplir un sueño", continúa Tian Cheng Yang. Todo ello, sin presión mental y sin violencia, conforme a la tendencia natural, encarando los asuntos "lo menos subjetivamente posible y actuando en el punto medio”.