Cada uno de nosotros tenemos un lugar especial para alejarnos de todo, nuestro Santuario. Andrew Kinsella nos lleva en un viaje a un lugar así, en el bosque verde, a un remanso de serenidad gozosa, la soledad y el retiro. En el álbum "Forest Sanctuary", una suave mezcla de instrumentación, atmósferas ricas y melodías evocadoras nos invita a lo largo de caminos secretos lejos del mundanal ruido. Un sonido imaginativo único que está lleno de mística, combinando ritmo hipnótico con inquietante melodía. Andrew Kinsella explora los muchos temas de la vida espiritual de la Tierra evolucionando hacia su destino. Con paisajes sonoros tranquilos y estados de ánimo edificantes, su música es la ayuda perfecta para la relajación.
Andrew Kinsella - Forest Sanctuary (2015 )
01. Secret Paths
02. Gentle Cascade
03. Blissful Serenity
04. Heart Of The Forest
05. Healing Waters
Duración total: 54:37 min.
Hay canciones que nos ponen "bien", otras decimos que nos ponen "mal", no hay música que pueda sernos totalmente indiferente. La música toca la fibra de nuestra historia, nuestros recuerdos, nuestros sentimientos.
ResponderEliminar“El silencio es el lenguaje de Dios; todo lo demás es una pobre traducción.”—Rumi
ResponderEliminar🌿 Cuando el mundo habla demasiado, el alma susurra.
Hay momentos en que no necesitamos explicaciones, sino presencia… un espacio donde el corazón pueda escucharse a sí mismo.
El silencio no es ausencia, es plenitud sin forma. Y cuando logramos entrar en él, todo se vuelve claro sin necesidad de palabras.
Ahí, en esa hondura callada, habita lo divino.
🎵 A una década de haberlo compartido por primera vez, Forest Sanctuary sigue latiendo con su misma esencia de retiro y contemplación.
La música de Andrew Kinsella no envejece porque no busca actualidad, sino eternidad.
Las texturas suaves, los ritmos hipnóticos, las melodías que parecen brotar del suelo húmedo del bosque… todo conduce a un estado: el del alma que se reencuentra consigo misma.
Más que un álbum, es una experiencia sensorial y espiritual. Una invitación a desandar los caminos del ruido para encontrar, en lo profundo, ese claro en el bosque donde uno vuelve a ser.
✒️ Diario del Viajero Interior: “Donde la música calla”
Hoy sentí que no hacía falta decir nada.
La luz se filtró entre los árboles y me bastó con mirarla.
El santuario no fue un lugar, ni siquiera una música… fue ese instante en el que todo se aquieta y me reconozco dentro del silencio.
No busqué refugio.
El refugio me encontró.
🌒 Más Allá del Crepúsculo
Al caer el día, vuelvo a recordar que los verdaderos santuarios no tienen dirección postal.
Están hechos de instantes sagrados: el crepitar de una hoja, el eco de una melodía interior, el latido que acompasa al mundo.
La música de Kinsella no decora la tarde… la consagra.
Y en ese acto silencioso, me retiro del mundo sin irme de él.
Solo me dejo llevar hacia adentro, donde todo tiene sentido sin decirlo.