Peace Is Now (Folk) - Bodhi - Peace Is Now (2014)

El concepto de "La Paz es Ahora" es uno de los más singulares e interesantes. A lo largo del álbum, la melodía y el canto se convierten en un mantra coral que se canaliza a través de una amplia variedad de estilos musicales. El álbum incluye los talentos artísticos de 35 músicos de diferentes géneros con un mensaje que afirma un mundo de paz. Bajo la dirección experta de Bodhi muchas voces e instrumentos se unen para cantar y actuar como uno, manteniendo su carácter distintivo pero resonando en armonía. Aunque es más conocido por su exquisito trabajo de flauta, Bodhi toca la guitarra, teclados y voces, que se suman a la magia de esta grabación alentadora.

Comentarios

  1. Bienvenido Otoño en este oasis de paz! La paz es ahora, un disco muy recomendable con una canción exquista para los gustos más refinados!

    “Estar feliz es un momento. Ser feliz es un estado prolongado. Éste se prolonga porque es siempre recreado y alimentado. Alguien puede estar feliz siendo infeliz, es decir, tiene un momento intenso de felicidad (momento) como el reencuentro con un hermano que escapó de la muerte, igual que puede ser feliz (estado) sin estar feliz (momento), es decir, sin que le suceda algo arrebatador.” Leonardo Boff

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  2. Excelente reflexion, Neto!
    El tema de hoy es tan hermoso que las palabras quedan sin sentido al querer calificarlo...asique sencillamente entregaremos nuestra alma al sonido de los instrumentos y a la suavidad de la voz !!
    La carátula es preciosa..como el mantra que se repite...PEACE IS NOW.... la paz es ahora....
    Y te cuento Neto...La palabra "Bodhi" en sánscrito significa "totalmente despierto".
    GRACIAS AMIGO por este regalo sobrenatural!

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  3. Y como no podia ser de otra manera.... hoy damos la bienvenida al otoño...y con él a nuestras amiguitas Ole y Trufa, que ya forman parte de este remanso para almas sensibles! Vamos a recordar su historia..te parece?

    ❁ ✾En la copa de un árbol que había perdido todas sus hojas todavía quedaban dos. Una de ellas se llamaba Ole y la otra Trufa. Tanto Ole como Trufa estaban en la misma ramita. Como estaban en lo más alto del árbol, recibían mucho sol. Por alguna razón, que Ole y Trufa desconocían, habían sobrevivido a todas las lluvias, a todas las noches frías y a los vientos, y seguían aferradas al extremo de la ramita. ¿Quién sabe por qué razón cae una hoja y otra sigue firme? Pero Ole y Trufa creían que se debía al gran amor que sentían recíprocamente. Ole era algo más grande que Trufa y unos días más vieja, pero Trufa era más bonita y delicada. Una hoja puede hacer muy poco por otra cuando sopla el viento, cae la lluvia o azota el granizo. Incluso en verano una hoja puede desgarrarse y, al llegar el otoño y el invierno, ya no se puede hacer nada. Aun así, Ole no perdía ocasión de animar a Trufa. Durante las peores tormentas, cuando retumbaban los truenos, centelleaban los relámpagos y el viento arrancaba no sólo hojas, sino ramas enteras, Ole le decía a Trufa:
    -¡Sujétate, Trufa! ¡Agárrate con todas tus fuerzas!
    A veces, durante las noches frías y tormentosas, Trufa se lamentaba:
    -Ha llegado mi hora, Ole, pero tú no te sueltes.
    -¿Para qué? -preguntaba Ole-. Sin ti mi vida no tiene sentido. Si te caes, caeré contigo.
    -¡No, Ole! ¡No lo hagas! Mientras una hoja pueda sostenerse, no debe soltarse...
    -Todo depende de que te quedes conmigo -replicaba Ole-. De día te contemplo y admiro tu belleza. De noche aspiro tu fragancia. ¿Ser la única hoja de un árbol? ¡No, jamás!
    -Ole, tus palabras son muy dulces, pero no son ciertas -dijo Trufa-. Sabes muy bien que ya no soy bella. ¡Mira qué arrugada estoy! Toda mi savia se ha secado y me da vergüenza de que los pájaros me vean. ¡Me miran con tanta lástima...! A veces me parece que se ríen de lo arrugada que me he puesto. Todo lo he perdido, pero todavía me queda algo: mi amor por ti.
    -¿Y no es suficiente? De todas nuestras fuerzas, el amor es la mayor, la más hermosa -dijo Ole-. Mientras nos amemos, permaneceremos aquí, y no habrá viento, lluvia o tormenta que pueda destruirnos. Te diré algo, Trufa: nunca te quise tanto como te quiero ahora.
    -¿Por qué, Ole? ¿Por qué? Estoy completamente amarilla.
    -¿Quién dice que el verde es bonito y el amarillo no? Todos los colores son igualmente bellos.

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  4. Y justo en el momento en que Ole decía estas palabras, sucedió lo que Trufa había temido durante todos esos meses. Sopló un viento que arrancó a Ole de su rama. Trufa comenzó a temblar y a agitarse hasta el punto que pareció que también ella sería arrancada en seguida, pero estaba firmemente sujeta. Vio cómo Ole planeaba en el aire y la llamó en el idioma de las hojas:
    -¡Ole, vuelve! ¡Ole! ¡Ole!
    Pero incluso antes de que hubiese terminado de decirlo, Ole desapareció de su vista. Se mezcló con las demás hojas caídas y Trufa se quedó sola en el árbol.
    Trufa no pensaba que una noche pudiera ser tan larga como aquélla: tan oscura, tan helada. Le hablaba a Ole, esperando una respuesta, pero Ole estaba callada y no dio muestras de su presencia.
    Trufa le dijo al árbol:
    -Ya que me has arrebatado a Ole, déjame marchar.
    Pero el árbol ni siquiera se dio por enterado de este ruego.
    Después de un rato, Trufa se quedó dormida. No era sueño, sino una extraña languidez. Se despertó y, para su sorpresa, descubrió que ya no colgaba del árbol. El viento se la había llevado mientras dormía. Era distinto a lo que sentía cuando se despertaba en el árbol, cuando salía el sol. Ahora todos sus temores y sus angustias habían desaparecido. Ese despertar también le trajo una conciencia que nunca antes había experimentado. Saber que no era sólo una hoja completamente a merced del viento, sino que formaba parte del universo. Ya no era pequeña, ni débil, ni pasajera, sino parte de la eternidad. A través de alguna fuerza misteriosa, Trufa comprendió el milagro de sus moléculas, sus átomos, sus protones y sus electrones: la enorme energía que representaba y el plan divino del cual formaba parte. Junto a ella reposaba Ole y se saludaron con un amor del que antes no habían sido conscientes. Ya no era un amor que dependía de la suerte o el capricho, sino un amor tan poderoso y eterno como el propio universo. Lo que habían temido cada día, entre abril y noviembre, resultó no ser la muerte, sino la redención. Se levantó una brisa que elevó a Ole y Trufa por los aires, donde flotaron con una alegría sólo conocida por quienes se han liberado y han entrado en la eternidad...
    Tu eres Ole...yo soy Trufa...
    Te espero.
    ❁ ✾Siempre.❁ ✾

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  5. Hay Sandy! Que manera de llorar... por la emoción que siempre nos genera volver a revivir la historia de Truja y Olé.Gracias por traerla nuevamente al blog! y allá está pobrecita Olé en el suelo encantado de la música de Medwyn Goodall del día de hoy esperando...

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  6. Si Neto, hace años leí por primera vez la historia , y nunca dejé de recordarla y leerla..es emocionante...y una maravillosa metáfora de la vida..
    pero amigo..... las lagrimas te nublaron la visión...y les cambiaste los nombres a las hojitas, pobrecitas.... es Ole..... no Olé (que seria una hojita española) jiji y es Trufa (como la de chocolate)... no Truja... jajajaj

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  7. "El otoño es un andante melancólico y gracioso que prepara admirablemente el solemne adagio del invierno". George Sand.
    Bella frase de alguien que tomó otra identidad para enfrentar a la sociedad del momento y que no pierde vigencia, cuántas veces se toman diferentes identidades para ser aceptados por una sociedad hipócrita con derecho a juzgar. Reivindico a esta poetiza que tuvo el coraje de vivir su amor a pesar de las críticas.

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  8. Bueno Sandy, no todas las ojitas son iguales, las mías se llaman Truja y Olé... y Olé ya está descansado en el suelo de mi jardín a la espera de Truja que se encuentra muy arriba en el abedul y que no se va a desprender hasta que no sea la última y anuncie la llegada del nevador invierno... mientras tanto las pispeo para ver qué hacen... esta mañana observé que Olé le guiñaba un ojito! Así es el otoño... idas y venidas... pero sin perden lo esencial en la vida!

    Gracias Gloria por la frase.

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  9. jaja lo sé amigo, solo me dio gracia ㋡...cada hojita es un mundo y lleva su propia historia...pero sigue siendo una hojita y parte de la"gran hoja del Universo"...
    Idas y venidas..en la realidad dual en que vivimos, en la cual nos mecemos como péndulos, de un extremo al otro...

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  10. Trufa y Ole... Truja y Olé... se igual! ㋡

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